No title...

Es patético, si como yo y mis letras…
Es patético pero hoy me encuentro buscando obsesivamente en cada rincón de mi memoria un fragmento, un vestigio de “esa” historia que alguna vez escribí en mi vida… Obsesivamente buscando un sabor, un aroma o un maldito recuerdo que me traiga de vuelta esa sensación de “bienestar”, ese cosquilleo en mis entrañas, en cada fibra… gritándome que soy feliz, que amo y soy feliz…
Pero no hay nada, talvez lo soñé y al despertar ya había lo había olvidado. Quizás sus manos nunca se fundieron con mi piel, quizás nunca llegue a saborear sus besos.
Es patético, yo quería decirte con voz fuerte que si he amado, que la felicidad fue una constante tangible en mi vida… que claro, si entiendo… Pero no hay nada ¿No ves? ¡No puedo hacerlo!.
Recorro minuciosamente cada momento y si, talvez estoy loca y sólo hoy puedo verlo. Quizás aquel sueño hermoso termino siendo una horrible pesadilla y el cielo se transformo en infierno… y por años me he despertado gritando, con el rostro del amor desfigurado hiriendo mis pupilas, quebrando el silencio de la noche con el llanto absurdo del dolor de mi cuerpo… por que las heridas de hace mil años, duelen y sangran con el frío de la luna que se esconde del invierno…
Y mi alma se trasformo en un túnel oscuro y frío, en un agujero negro.
Y si! Huir… huir siempre sigue siendo el mejor remedio.

Y eso soñé...

Tuve miedo, si, miedo de tu arrogancia, de la manera de ver las cosas, miedo de “encantarme” de tu altanería, miedo de que tengas toda la razón…
Preferí mirarte como un capricho, como ese capricho de niña mimada que es mejor olvidar, para no lastimarme, para no hacerme adicta…
Y tu sonrisa de lejos y tu mirada cómplice, obligándome a bajar la vista… mil veces negaré tu nombre si es necesario… mil veces huiré de tus ojos. La vida no es sólo esto, si no que todo lo demás y tú no sabes como detenerte a tiempo.
Sedúceme… convénceme y ¿Tú que harás?
El placer no se compra, no se tranza, no está a la venta… no se pide… simplemente se da…
Necesito exclusividad… tú que pides.
No hago filas, nunca las he hecho… jamás las haré. De eso se trata.
Y tu que me darás ¿?
No ves como pierdes por no saber callar las cosas que está demás decir. No vez que me aterra no saber ganar.
Ya no me importa quien pierde más… esto sobre el orgullo, el des-compromiso, el desamor… ¿No sabes diferenciar?.
Miedo de que tu sombra sea más rápida que yo… de que tus manos corran y me alcancen…
Tuve miedo y huí… ¿Tú lo hiciste antes que yo? ¿Tú me mostraste el camino a seguir?

Incoherencias

El miedo de perderme en tu sonrisa, de sentir esto que siento hoy recorriendo mi alma, de lo que despiertas… miedo a tu volatilidad, a que te esfumes…
La voluntad y la poca razón, el perfume del deseo, la fuerza inmensa de dos polos atrayéndose… la duda…
La ambigüedad, las palabras que no deben salir de mi boca…
Mirarte y saber que sólo tu entiendes mi mirada… mirarte y saber que quieres decir…
Jugar y no perder, saber que pieza exacta debo mover…
El aire que necesito para vivir…
¿Maldición, cuánto significas para mi?
Dame tu calor, abrígame…